"Somos Pueblo de Dios" esta declaración recuerda a los cristianos su identidad espiritual, su pertenencia a una comunidad redimida, su misión de ser testigos del amor divino y su esperanza en un futuro glorioso. Es un llamado a vivir con propósito y a reflejar en cada acción la gracia y la verdad del Dios que los ha escogido. Nuestro Propósito El propósito de la Iglesia es adorar a Dios, proclamar el Evangelio, discipular a los creyentes, ser una comunidad de amor, servir al prójimo, preservar la verdad y vivir con esperanza escatológica. Es el cuerpo visible de Cristo en el mundo, llamado a reflejar Su carácter y cumplir Su misión.
Nuestro Propósito
El propósito de la Iglesia es adorar a Dios, proclamar el Evangelio, discipular a los creyentes, ser una comunidad de amor, servir al prójimo, preservar la verdad y vivir con esperanza escatológica. Es el cuerpo visible de Cristo en el mundo, llamado a reflejar Su carácter y cumplir Su misión.
Nuestra Misión
Como pueblo de Dios, los creyentes somos enviados a ser luz y sal en la tierra (Mateo 5:13-16). Esto implica reflejar el carácter de Dios —amor, justicia, misericordia y verdad— en todas las áreas de la vida. La misión no es solo proclamar el Evangelio, sino también actuar con compasión, trabajar por la justicia y transformar el mundo a través del testimonio cristiano.
Por tanto, vayan y hagan discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, 20 enseñándoles a obedecer todo lo que les he mandado a ustedes. Y les aseguro que estaré con ustedes siempre, hasta el fin del mundo.
Mateo 28:19 NVI
Nuestros Valores
Identidad en Cristo
La identidad en Cristo es un concepto fundamental en la vida cristiana que describe quiénes somos en relación con Jesús y lo que significa ser un seguidor suyo. Esta identidad no se basa en logros personales, estatus social o cualquier otra circunstancia terrenal, sino en lo que Cristo ha hecho por nosotros a través de su vida, muerte y resurrección. Entender nuestra identidad en Cristo nos ayuda a vivir con propósito, seguridad y libertad, sabiendo que nuestra verdadera identidad está en Él.
La Iglesia como Familia
Ver la Iglesia como la familia de Dios nos recuerda que la vida cristiana no es un viaje individual, sino una caminata comunitaria. Todos los creyentes estamos llamados a vivir en armonía, a cuidarnos mutuamente, a perdonarnos y a apoyarnos como lo haría una familia terrenal. La Iglesia, como familia de Dios, es un lugar donde experimentamos el amor de Dios, compartimos nuestras vidas y cumplimos juntos el propósito divino de extender su reino en la Tierra.
Cultura de Reino
La cultura del Reino de Dios es un concepto fundamental en las enseñanzas de Jesús, que se refiere a los valores, principios y normas que caracterizan la vida de aquellos que han aceptado la soberanía de Dios y viven bajo su autoridad. Este Reino no es de este mundo, pero sus efectos deben transformarlo.
Guía del Espíritu Santo
La guía del Espíritu Santo es esencial para la vida cristiana, pues Él nos dirige hacia la verdad, nos ayuda a tomar decisiones sabias, nos capacita para vivir una vida santa y nos da el poder para cumplir la misión de Dios. Al abrir nuestro corazón a su dirección y someternos a su liderazgo, podemos experimentar una vida llena de paz, gozo y propósito, reflejando el carácter de Cristo y expandiendo su Reino en el mundo.
En que creemos
Jesús como señor y salvador
Jesús es el Señor y Salvador al ser el Hijo de Dios que vino al mundo para redimir a la humanidad del pecado y la muerte. A través de su sacrificio en la cruz y su resurrección, ofrece perdón y vida eterna a quienes creen en Él, reconociéndolo como el único camino hacia Dios.
La Fe y la practica
La fe y las obras son inseparables. La fe salva, pero las obras demuestran que esa fe es genuina. Al tener fe en Cristo, somos transformados y llamados a vivir de acuerdo con su voluntad, mostrando su amor a través de nuestras acciones y siendo luz en el mundo.
Pastores y colaboradores
Miguel Ángel Singh
Miguel Singh fué reconocido en el ministerio en el año 1980. Ha dedicado su vida a acompañar a cientos de personas, enseñando y compartiendo las verdades de Jesús de una manera sencilla y clara. Su ministerio se ha enfocado profundamente en la oración y la meditación como herramientas para conocer a Dios.
Gustavo Roganovich
Gustavo Roganovich fué ordenado en el ministerio en el año 2000. Ha establecido la obra local en Venado Tuerto, dedicándose al acompañamiento y formación de vidas con el propósito de desarrollar una congregación sana y madura en Dios.
Andrés Roganovich
Andrés Roganovich fué ordenado en el ministerio en el año 2024. Está dedicado a la obra local, enfocándose en la formación de equipos, la vida en comunidad y el trabajo social para bendecir y ayudar a los más necesitados.
Bruno Medina
Bruno Medina fué ordenados en el ministerio en el año 2024. Está dedicado a la obra local, trabajando en la formación de equipos, el fortalecimiento de grupos pequeños y el desarrollo de tareas evangelísticas.